Hoy ha sido un día muy emotivo e intenso. Además de descubrir la gran ciudad de Toronto, capital de la economía canadiense, hemos tenido la primera de las despedidas, ya que parte del grupo con el que hemos compartido esta experiencia regresa mañana a casa. Y por eso, nuestro chicos no han queridos desaprovechar ni un segundo de este día.
Cuando hemos llegado, la sorprendente CN Tower nos estaba esperando. Todo lo que tiene de alta, lo tiene de imponente. Desde arriba hemos podido admirar la arquitectura tan especial y sorprendente de Toronto. Allá donde mirábamos, podíamos descubrir innumerables rascacielos, agua y vegetación.
Una vez vista la ciudad desde arriba, tocaba verlas desde un barco. Así que, hemos decidido hacer un pequeño crucero, de casi una hora, recorrer el puerto y las cercanas islas de Toronto, mientras admirábamos la fauna y la flora tan características de la zona.
Para finalizar un grandioso día, estuvimos paseando por el Eaton Center, un gran centro comercial lleno de tiendas en el centro de la ciudad. A las 19:30h, después de descubrir los atascos de Ontario, estábamos de regreso en Cambridge, momento en que alguna que otra lágrima ha caído al decirnos adiós.
Como decíamos al principio, ¡un día muy intenso!