Viernes, final de semana, estamos un poco tristes porque los estudiantes franceses se van mañana. Por la tarde hemos ido a la playa. Pero el tiempo no acompañaba para darnos un baño, así que hemos ido a jugar a volley y a básquet. En el camino a las pistas hemos conocido a unos jugadores de fútbol americano y, tras descansar un poco en las toallas bajo las palmeras, hemos ido de tiendas y nos hemos tomado un helado. Al esperar el autobús, una tormenta nos perseguía, pero al final hemos tenido suerte y hemos llegado a casa sin mojarnos.