Amanecemos tras una intensa jornada de esquí y tras el tradicional desayuno todos juntos junto a la chimenea cogemos maletas y bajamos la montaña dirección a Queenstown.
Tenemos la mañana libre para poder visitar su bonito puerto, comprar souvenirs, característicos son los elaborados con greenstone.
Ya por la tarde visitamos las instalaciones de una piscifactoría de salmones e incluso les damos de comer. Objetivo: comprar rico salmón para la cena que a la llegada preparamos, delicioso!!!! Ya nos queda poquito, mañana último día!