Amanecemos y seguimos nuestra ruta por la cosa oeste, primera parada las Punakaiki Rocks donde dando un paseo hemos disfrutado de unos espectaculares paisajes, ninguno de sus rincones tiene desperdicio. Después del lunch hacemos parada en la bella playa de Hotitika, nos llama la atención lo especial de la espuma en sus orillas y el regalo de su atardecer.
Tras un largo camino llegamos a nuestro alojamiento, unas preciosas cabañas en donde algunos, antes de nuestra deliciosa cena buffet de pizza, deciden probar el jacuzzi. Nos deleitamos con su exclusivo entorno desde donde divisamos a lo lejos las nevadas montañas de Queenstone.
Cada día que pasa nos sentimos más afortunados de estar viviendo esta irrepetible experiencia.